
Me ha costado encajar esta historia de discriminación doméstica en una época tan cercana como los años sesenta. No sé porqué mi cerebro se negaba a asimilar que al mismo tiempo que Bob Dylan cantaba y Neil Armstrong pisaba la luna, en Misisipi se produjeran escenas de discriminación racial como las que narra el libro y continuamente tenía que obligarme a reubicarme temporalmente.
Es una historia fácil de leer pero un tanto plana, con un final previsible y unos personajes maniqueistas, buenos o malos, rubias platino vestidas de rosa chicle, negras gordas y bonachonas y los hombres sombras poco presentes y sin opinión ni personalidad en el entorno doméstico.
Creo que en este caso habría sido preferible ver la película.
Es un libro que tengo ganas de leer desde hace tiempo, me llama bastante la atención
ResponderEliminarA mí este libro me gustó mucho. Aunque desde luego sí admito que los personajes son un poco planos y la historia es previsible. Pero me gustó mucho la forma en que está escrita y el estilo de la autora. Y saber que historias no iguales, pero parecidas sucedieron y no hace tanto tiempo... Y aún sigue sucediendo en otras partes del mundo...
ResponderEliminarBesotes!!!
Nunca me apeteció leer el libro, pero la peli no estuvo mal
ResponderEliminarBesos